Para muchos este es el Día en que todos debemos reconocer la autoridad de Cristo nuestro Señor; por eso el Lunes Santo es llamado el "Lunes de la Autoridad" ; otros afirman que es el "Lunes de la Purificación" debido a que en el evangelio de hoy, nuestro Señor entra en el templo y pone orden en la casa de su Padre para que ésta sea Casa de Oración.
Reconozcamos pues en este día santo la autoridad y la enseñanza de nuestro Señor y no hagamos de las cosas santas según nuestro criterio, sino según la voluntad de Dios. Como nos enseñó la segunda lectura de ayer en Filipenses 2:5, nuestra actitud debe ser como la de Cristo Jesús.
Pasemos un bendecido buen LUNES SANTO.
OREMOS
Dios todopoderoso, cuyo muy amado Hijo no ascendió al gozo de tu presencia sin antes padecer, ni entró en gloria sin antes ser crucificado: Concédenos, por tu misericordia, que nosotros, caminando por la vía de la cruz, encontremos que ésta es la vía de la vida y de la paz; por Jesucristo tu Hijo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.Sé nuestra luz en las tinieblas, oh Señor, y por tu gran misericordia defiéndenos de todos los peligros y riesgos de esta noche; por amor de tu único Hijo, nuestro Salvador Jesucristo. Amén.
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