domingo, 10 de marzo de 2019

Domingo 10 de marzo: San Lucas 4:1-13 I Domingo de Cuaresma

Introducción
Estoy seguro que después de haber leído en tu Biblia éste pasaje, estamos listos para que juntos  meditemos en el mensaje necesario para nuestra vida. No lo olvides, es bueno buscar un momento y un lugar para tranquilizar el espíritu, aquietar el alma y así recibir el mensaje salvador del Evangelio, busca tu Biblia para que leamos por lo menos dos veces el texto de hoy, San Lucas 4:1-13, luego vamos a la reflexión. Tómate tu tiempo.

REFLEXIÓN
El evangelio de hoy nos cuenta sobre la "Tentación de Jesús" y cómo es que el diablo se dio por vencido al no poderlo vencer (lean el versículo 13). 
Debemos recordar que para iniciar su ministerio, nuestro Señor Jesús pide ser bautizado en el río Jordán, siendo inocente y limpio de todo pecado, se acercó al bautismo como si fuera un pecador; ésa es la primera gran enseñanza de nuestro Señor para nosotros y es después de ser bautizado que se dirige al desierto para permanecer allí durante cuarenta días en ayuno y oración (como si viviera su propia Cuaresma). Espero que todos nosotros estemos viviendo también plenamente nuestra propia Cuaresma, que pasemos éstos días en ayuno, en oración constante, en conversión, en arrepentimiento, en reconciliación y cambio. Seguramente que también vamos a ser tentados, como lo somos día a día, porque nadie está libre de las tentaciones, ni siquiera nuestro Señor Jesús se libró.

Lo que debemos entender es que las tentaciones son la oportunidad para demostrar que estamos fuertes en el Señor, que le somos fieles y que vencemos al mal; Cristo lo hizo y nosotros como cristianos, somos imitadores de Cristo, ya fuimos lavados por medio del bautismo y hemos recibido el Espíritu Santo de Dios que nos hace victoriosos sobre todo mal; ese Espíritu nos dará la victoria, con el Espíritu Santo podremos vencer todas las tentaciones del mundo y seremos dichosos. 

Dice claramente la lectura de hoy en el versículo 1, que Jesús lleno del Espíritu Santo fue llevado al desierto; lleno de ese poder divino que le permitió responder y actuar frente a las tentaciones y salir vencedor. Hagamos que ése mismo Espíritu permanezca en nosotros, que nos llene también para así poder vencer todas las tentaciones. Oremos constantemente, con perseverancia, con devoción, con súplicas y ruegos, clamemos al Espíritu que lo necesitamos tanto; que las respuestas de Cristo Jesús nuestro Señor nos animen esta semana:
"No sólo de pan vive el hombre"
Busquemos el alimento espiritual constantemente para nuestras vidas y las vidas de los que amamos.
"Adora al Señor tu Dios y sírvele solamente a Él"
Y la última gran enseñanza para hoy, para siempre en nuestras vidas es:
"No pongas a prueba al Señor tu Dios"
Recordemos que nosotros no somos nadie para dudar del poder divino, nunca lo pongamos a prueba, alejémonos del peligro de la tentación y busquemos en toda circunstancia permanecer limpios y libres de pecado.
Que sigamos viviendo una buena Cuaresma.
Dios nos bendiga y ayude

OREMOS
Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

Omnipotente Dios, cuyo bendito Hijo fue llevado por el Espíritu para ser tentado por Satanás: Apresúrate a socorrer a los que somos atacados por múltiples tentaciones; y así como tú conoces las flaquezas de cada uno de nosotros, haz que cada uno te halle poderoso para salvar; por Jesucristo tu Hijo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

Bendigamos al Señor.
Demos gracias a Dios.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos nosotros, ahora y siempre. Amén.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO.