REFLEXIÓN
Como dice el libro de los Hechos 4:12, no hay otro nombre dado a los hombres por el cual uno puede ser salvo, esa es una gran e indiscutible verdad para todos.
Antiguamente este día era llamado como el "Día de la Fiesta de la Circuncisión" debido a la costumbre de circuncidar a todo niño al cumplir los ocho días de nacido. En esa fiesta se invitaba a todos los parientes, amigos y vecinos al evento, todo era alegría y gozo, el niño era nombrado y reconocido; luego se destacaba su nombre, de allí que con el tiempo se celebró en este día "El Santo Nombre de nuestro Señor".
Uno de los primeros concilios de la Iglesia (año 567) decretó que fuera un día especial, de ayuno y de oración, de reconocimiento a la Santísima Virgen como madre de nuestro Señor y de alegría ante el nombre de nuestro Señor.
Pronunciemos hoy el Santo nombre de nuestro Señor deforma especial, recordando su significado hermoso: Libertador, Salvador, Redentor...
Un abrazo
OREMOS
Padre eterno, tú diste a tu Hijo encarnado el santo nombre de Jesús para ser el signo de nuestra salvación: Te suplicamos que siembres en cada corazón el amor de quien es el Salvador del mundo, nuestro Señor Jesucristo; que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.